Desde los tiempos del homo-erectus los animales y las plantas han desarrollado una capacidad de relación avanzada. Este valor se hace llamar cooperación, consiste en aportar un granito de arena cada uno de los individuos y beneficiarse todos.
Un humano le da amor y alimento a un perro y el perro le da compañía y fidelidad al humano. Un pez limpia a un tiburón y el tiburón protege al pez. Una abeja poliniza las plantas y las plantas proporcionan alimento y oxígeno. En líneas generales, mediante la cooperación, los seres vivos logran objetivos que como individuos sería imposible.
En El Campo de Verano se coopera de muchas formas, ayudándonos unos a otros a conseguir las metas y un gran ambiente de convivencia. Unos cocinan para todos mientras otros se encargan de congelar momentos mágicos en fotos, vídeos o revistas. Se siembra y preparan alimentos ecológicos para poder comer se forma sana, se construyen zonas comunes para utilizar de diferentes maneras. Además, se enseñan aspectos del cuidado de medio ambiente o a integrar a personas con dificultades.
El Campo de Verano es como un hormiguero, todos nos encargamos de algo beneficioso para el conjunto, tanto de las personas, como de los animales o el resto del Medio Ambiente.
En resumen, una cooperación bien hecha genera felicidad y en el Campo de Verano se hace realidad.